martes, 9 de septiembre de 2014

El amor


Yo no busqué el amor ni sus angustias. Sólo quería ser el niño que amaba las bicicletas y que cuando estaba triste encontraba en las caricias y las palabras de mamá el refugio perfecto para los miedos. 
 
El amor me arrancó de esa eternidad y me convirtió en ese que hoy soy: el mejor compañero de la tristeza y  de la soledad. 
 
He perdido la felicidad que era mía. Ya no hay dicha en la vida ni en los sueños. Estoy, pero como si no estuviera. Estoy, pero no soy. 
 
Yo no busquéel amor ni sus tristezas. Pero ellas llegaron a mí; me llevaron a vivir con ellas y me amaron como nadie me ha amado en este mundo. 
 
Yo no busqué el amor, pero sé de él todos sus dolores, soledades y tristezas. 

Y, sin embargo, volvería a repetir uno a uno todos los amores que tuve, porque son lo mejor que me ha pasado.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario